• INE, sin certeza del proceso de elección de jueces y magistrados cuando se carece de ley secundaria, criterios y presupuesto para un proceso implicaría mínimo cuatro horas para sufragar
• Demanda a Sheinbaum políticas públicas con visión de género: “De nada sirve que llegue una mujer Presidenta o que hayamos legisladoras sino logramos transformar la vida de las mexicanas”
• Firme en su postura de frenar la enmienda, el blanquiazul presentó un amparo para impugnar el proceso legislativo y más de 20 municipios registraron controversias constitucionales por no haber sido consultados

La Coordinadora del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional en la Cámara de Diputados, Noemí Berenice Luna Ayala; y el legislador Federico Döring Casar, exigieron a las bancadas de Morena; Partido Verde y del Trabajo, hacerse responsables de los 357 votos que emitieron, hace 20 días, para aprobar “fast track” las reformas constitucionales al Poder Judicial ante el eminente fracaso por carecer de leyes secundarias, presupuesto e inaplicabilidad.

La también Secretaria General del PAN nacional enfatizó en entrevista que el albiazul mantiene firme su postura de tumbar esta enmienda, por lo que presentó ya un amparo ante el Juez Federal número 14 de la Ciudad de México para impugnar el proceso legislativo en el que por mayoría el oficialismo, en su premura, aprobó con acciones plagadas de anomalías.

Adelantó que más de 20 municipios también presentaron controversias constitucionales por no haber sido consultados sobre la reforma al Poder Judicial, hecho que violenta la Constitución, por tratarse de población indígena que tiene derecho a ser considerada al tratarse de ordenamientos que impactan directamente sobre sus usos, costumbres y tradiciones.

“Hemos dicho que en la práctica la elección de los juzgadores es totalmente inviable y el gobierno tendrá que estar consciente de la atribución del presupuesto… La verdad es que los grupos del oficialismo hicieron un proceso mal llevado y no tengo duda y, lo lamento, que incluso la legislación en las leyes secundarias va a ser igual de torpe en perjuicio del Poder Judicial y de México”, agregó la Coordinadora panista.

“Deberían de haberlo aceptado desde el principio. Nosotros, desde la Comisión de Puntos Constitucionales señalamos que es una reforma totalmente inviable, que nunca buscó una mejora en el Poder Judicial. Era una clara venganza del Presidente de la República respecto a un poder que hizo su trabajo. Marcar el límite de hasta dónde llega un poder respecto a otro poder”.

Entonces, que se hagan responsables quienes aprobaron esta tontería, precisó la legisladora Noemí Luna.

Por su parte, el Diputado Döring Casar evidenció la incapacidad que ayer mostró el Instituto Nacional Electoral (INE) cuando inició el proceso extraordinario para la selección de magistrados, jueces y ministros a través de voto popular.

Citó que “la Consejera Presidenta Guadalupe Taddei y la consejera Carla Humphrey no hicieron más que curarse en salud, porque quedó claro que no tienen certeza de cuándo se tendrá la ley secundaria, ni de los criterios ni del presupuesto para elegir entre más de 4 mil nombres a los 648 nuevos ministros, magistrados y jueces sólo para la Ciudad de México. Este único proceso implicaría a las y los capitalinos cuatro horas de su tiempo para votar.

“Está tan mal hecho el frankenstein electoral para designar a jueces y magistrados que “¡Ni ellos mismos se atrevieron a dar certeza de que obtendrán buenos resultados… Hay que tomar todo con reservas. Habrá que ver si se sostiene el Dictamen y, de ser el caso, si se puede llevar a feliz puerto una elección que está muy mal diseñada y sin dinero ni lineamientos”, externó el legislador Döring.

Estás de acuerdo en que cada día las y los mexicanos batallamos más para vivir con dignidad.

Esto es porque hemos tenido inflaciones sin precedentes. Pese a que hubo un aumento al salario mínimo, subió el gas, subió la leche, subió la carne; y esto ocasionó que el poder adquisitivo de los mexicanos tuviera un impacto en el 73 por ciento.

Por eso, hoy en la Cámara de Diputados y Diputadas los panistas estamos de acuerdo con el resto de los grupos parlamentarios de una reforma constitucional que ponga muy claro que el salario mínimo nunca va a estar por debajo de la inflación.

El salario mínimo no es otra cosa que la mínima cantidad que debe recibir la persona trabajadora por sus servicios.

Actualmente, en el 2024, para la zona libre de la frontera del norte está en 374.89 pesos y para el resto del país en 248.93 pesos; pero la inflación en los últimos años, ha estado por los cielos.

Por eso, con esta reforma queremos familias fuertes, queremos un salario digno y estamos viendo porque la economía de las y los mexicanos mejore.